The Rock and Roll Hall of Shame

Mostrando entradas con la etiqueta Maná. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Maná. Mostrar todas las entradas

8/4/09

MANÁ - Amar es combatir


Una mañana común y silvestre de abril, un par de años atrás, yo desayunaba y analizaba los resultados del waterpolo. ¿Estaba soñando? Esto fue lo que leí:

ZONA "CAMPEONATO":
Spacemen: 3 – UB: 40
Opus: 4 – Vocal: 5
U: 2 – V: 8
Sigma: 6 – Episode: 6
Fun Boy: 3 - The Migil: 5
Suzie: 4 – Us: 3
Dave Clark: 5 – Sex Clark: 5
Current: 93 – Dulces: 16
Heaven: 17 - East: 17
L: 7 – Danger: 4
Ben Folds: 5 – Gang Of: 4
Mack: 10 - D: 12
Área: 12 - Room: 92
The Count: 5 - Univers: 0
Eiffel: 65 - Vega: 4
Zero: 7 - S Club: 7
Redemption: 87 - Group: 87
Finger: 11 - Click: 5
The B-: 52 – Sham: 69
Attaque: 77 – La: 25
.
ZONA "PERMANENCIA":
Soul Kid: 1 - Fan: 3
Altern: 8 - MC: 5
+: 44 - Salem: 66
Charlie: 3 - Maroon: 5
Galaxie: 500 - Black: 47
Circus: 2000 - Death From Above: 1979
June Of: 44 - September: 67
Fórmula: 5 - Conexión Nº: 5
Gamma: 2 - Matchbox: 20
Sum: 41 – Level: 42
Club: 8 – Buenos Aires: 8
Stars On: 54 - The Jackson: 5
Remo: 4 - Family Force: 5
G: 3 – Q: 65
Equipe: 84 - Eve: 6
Blog: 27 - Modern Day: 0
Blink: 182 – Front: 242
Airport: 5 - Bleach: 03
Deltron: 3030 - Kassin: 2
M: 83 - Pg: 99
.
Bastante embrollado, bajé las escaleras hacia la calle. Soy vendedor de sitios de Internet y debía visitar clientes, para lo cual emplearía diversos medios de transporte público. Lo malo era que mi i-pod (?) se había caído al retrete, mas resolví no hacerme mala sangre.
El primer colectivo que tomé me llevó desde Adrogué hasta Lomas de Zamora, y la música que emanaba pertenecía al entonces más reciente álbum de Maná: “Amar es combatir”. La canción era “Labios compartidos”, su principal corte. Medité: “Pocas bandas tienen la capacidad de repetirse tanto. Esto puede ser algo malo o bueno, según se mire, pero seguro que a quienes les guste la banda, les satisfará escuchar una y otra vez lo mismo, y yo no diría sólo que sus álbumes se parecen entre sí; también sus canciones.”

Más tarde tomé otro colectivo que me acercó a la vieja estación de Monte Chingolo. Cuando tomé asiento, la locutora de la radio sintonizada anunció otro tema de Maná: “Bendita tu luz”.
Reflexioné: “¿Por qué se me hace tan soporífera esta banda? Quizás se deba a la forma de cantar de Fher Olvera, sumada a lo monotemático de sus letras, que hacen de su obra una cantinela que lleva al agotamiento. Habrá que seguir esperando que cambien de chip, pero lo veo difícil.”

Una vez hube atendido a mi siguiente cliente, tomé un remís hasta Bernal para una entrevista en una fábrica de encurtidos. Tanto en el auto, como en la recepción, se escucharon dos cortes más del disco: “Ojalá pudiera borrarte” y “Manda una señal”.
Cavilé: “Tengo la teoría de que si a cualquier canción de este grupo se le pudiera serruchar la parte cantada, se conseguiría encastrar cualquier otra letra de sus complacientes discos. Ninguna canción suena original, pues todas contienen invariablemente las palabras “amor” y “corazón”. Es el mismo producto estereotipado, reciclado una y otra vez desde “Falta amor”. ¡Que se jubilen ya!”

Tuve que soportar 29 emisiones más de “Labios compartidos” en otros colectivos y taxis, y también en el hipermercado de Avenida La Plata, donde almorcé, con el agregado ocasional de “Somos mar y arena” y “Dime, luna”. A pesar de lo exitoso de mi gestión comercial, aquellas melodías ya me tenían los nervios de punta y las criadillas en escabeche, por lo que, pretendiendo descansar la mente, opté por tomar un minibus ejecutivo que me llevaría confortablemente de regreso a casa. Pero, como no podía ser de otra manera, en el vehículo sonaba: “El rey tiburón”, y por enésima vez, “Labios compartidos”. Y ahí sí que perdí el control, lo que hizo que los pasajeros entraran en pánico.
Aullé: “Estos retoños de una gran perra, vigilantes fabricados con la peor margarina de la manoseada roseta de su reiteradamente ultrajada madre, no tienen nada mejor que hacer que seguir en su encajetadísima postura de cantar siempre la misma mierda. Hijos bastardos de Bon Jovi y del peor churrasco mal cagado de Los Nocheros, bisnietos de un container de excremento de patovica antirreglamentario, mezcla con aceite rancio del más relajante stripper de pulpería de provincia. Claro. A las mujeres les gusta esta cretinada. Insaciables que se relamen de gusto con ‘pps’ de machos en pelotas y que tienen en su cuarto una gigantografía del tonel de diarrea llamado Alejandro Sanz, más otra de Richard Gere meditando.”

Luego me descargué contra el chofer: “Pero vos sos hombre, pedazo de condón de ocasión, ¿y te gusta esta grasada? Sos un nimio paramecio con un coeficiente de 35. Ponete media pila, tirá ese disco a la renegrida ostra que lo concibió, y comprate uno de Cannibal Corpse, mariposón de hule. ¿Entendiste, polichinela mal nacido de la peor cesárea? O querés que te lo explique a sopapos, rata a medio envenenar, sobrino de una gran hiena en descomposición. ¡Odio a Fher Olvera y a todos los que aman a Maná! ¿Así que amar es combatir? Yo te voy a combatir por amor a vos y a esos ahijados dilectos de Nosferatu, que pululan entre los desperdicios de un Yorkshire con displasia.”

No recuerdo nada más. Pasé los siguientes meses en coma hasta que me finalmente desperté. Ya no trabajo. Ya no tengo rencores. Por culpa de Maná, ahora soy el nuevo Tommy, todo el día insensible, jugando al 3D Pinball.
n
Prevención: Si toman un medio público, no salgan de su casa sin auriculares. Muchos colectiveros, taxistas y remiseros son parte de una peligrosa logia secreta que responde a su líder, Fher Olvera, ¡y quieren dominar el mundo secándonos el cerebro!
¡Qué pasa! ¿No me creen?
g
Por favor, no miren este video, porque la próxima vez que vayan a Cancún y encaren a una chica, van a querer estar rodeados de una cohorte de mariachis que los seguirán a todos lados preguntándoles cómo se hace para entrar ilegalmente a Estados Unidos. Lo peor es que ellos sí van a ingresar, pero ustedes se quedarán sin remedio en la frontera preguntándose compungidos dónde queda la casa de Verónica Castro.



OTROS EJEMPLARES DEL MISMO TENOR: todos sus discos, sin excepción.
ANTIDOTO: glucagón.